GLORIA

Chunga que repite, chunga al cuadrado, más Gloria:

Déjame morderte, no puedo asegurarte que no te dolerá pero son tantas las ganas que tengo que los daños colaterales son necesarios, no te puedo decir de antemano hasta donde hincaré mis dientes y si el sabor salado de tu sangre hará que pare o por el contrario me empujara a morder más deprisa, pero de solo imaginarlo empiezo a salivar…

No sabia que tenia instintos caníbales, no hasta que te olí, necesito chuparte en los sitios donde se que ese perfume se concentra en más medida, déjame olerlo de cerca… pero no! No te acerques, empiezo a marearme y el vértigo hace que aparezcas borroso, tu olor me turba, no se si son las putas feromonas de la que se habla siempre pero desde luego no es un perfume comercial, lo se porque huele a vivo y porque podría reconocerlo rodeada de 20.000 personas, es tuyo, eres tú y necesito morderte, tengo que hacerlo, no podré vivir pensando que no lo hice. Vale, acércate poco a poco, cerraré los ojos para concentrar mis sentidos en él, solo somos dos, tu olor y yo… aprisiono tus manos con las mías a modo de grilletes sobre tus muñecas, joder! Ahora si que huele a ti, tus axilas desprenden aun mas intensamente ese enfermizo olor… paso mi lengua por la parte oculta de tus antebrazos, es lo que me temía, sabes mejor que hueles, empiezo a llegar a la parte blanda del brazo, la saboreo… si no habías visto a una leona cuando tiene a su presa en las garras, solo tienes que girar la cabeza hacia tu derecha un poco más y la encontrarás a unos centímetros, eres mi presa y solo estoy lamiendo el trozo que voy a empezar a devorar… ya no hay vuelta atrás, mis incisivos se clavan en tu carne, empiezas a moverte y aprieto mis manos alrededor de tus muñecas, ya sabias que esto sería así, por si queda alguna duda me miras a los ojos y compruebas que no queda resto de mi en ellos, se clavan en los tuyos fijamente, aunque te duela tienes que aguantar, el intentar huir seria aun peor, la sangre empieza a brotar abriéndose paso por mi boca que se empapa de ella… lo que me temía… el sabor me empuja a morder más deprisa… mis ojos se tornan blancos… ya no hay forma de parar…